IA Zupanets1*, SK Shebeko2
En la actualidad, el aumento de la eficacia del tratamiento de las enfermedades isquémicas en cardiología y neurología es una de las principales tendencias en los estudios clínicos, farmacéuticos y farmacológicos a escala mundial. En este artículo se analizan las cuestiones de la optimización del tratamiento antiisquémico mediante el ejemplo del uso combinado de precursores y análogos de la carnitina: propionato de trimetilhidrasina (TMHP) y γ-butirobetaína (GBB). Las ventajas farmacodinámicas de este uso combinado se caracterizan por la aparición del fenómeno sinérgico en forma de potenciación mutua de sus efectos. El TMHP es un conocido cardioprotector y neuroprotector; en el mecanismo binario de su acción, el componente metabólico es más significativo que el de vasodilatación y su combinación con GBB compensa esta deficiencia. La adición de GBB, en el contexto de la inhibición de su conversión en carnitina bajo la influencia de TMHP, conduce a su rápida acumulación en los tejidos isquémicos, al refuerzo de la síntesis de óxido de nitrógeno y a la rápida producción de vasodilatación, lo que, a su vez, mejora sustancialmente el componente metabólico farmacodinámico de la combinación dada. El presente concepto ha sido la base del desarrollo del regulador original de la función endotelial vascular, el fármaco "Capicor", que ha unificado las ventajas del citoprotector metabólico y endotelial TMHP, así como del corrector endotelial de GBB.