Abdulmoein E Al-Agha, Sarah M Shaikhoon, Mada A Sultan y Heba S Alsheikh
Antecedentes: Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la obesidad se convirtió en un problema epidemiológico y una de las principales causas de muerte en los países desarrollados. Los niños obesos parecen tener un mayor riesgo de desarrollar deficiencia de vitamina D debido a la limitación de su actividad física, que resulta en una exposición limitada al sol y deficiencia de vitamina D. Este estudio tuvo como objetivo identificar una relación entre el índice de masa corporal (IMC) y los niveles séricos de 25-hidroxivitamina D [25(OH)D]. Métodos: Este estudio transversal retrospectivo involucró a 458 niños (47,8% niñas y 52,2% niños) de 4 a 13 años. Se utilizó un diseño de estudio basado en cuestionarios, seguido de la medición de la altura, el peso y la vitamina D en una clínica pediátrica ambulatoria. Se determinó el percentil del IMC para cada sujeto según la OMS y la concentración sérica de vitamina D se clasificó como deficiente, insuficiente o suficiente. Se excluyeron los niños con enfermedades crónicas graves y los que recibían suplementos de calcio o vitamina D. Resultados: Se encontraron 418 (91,3%) niños con niveles bajos de vitamina D y 37 (8,1%) niños con niveles normales de vitamina D; en 3 (0,6%) niños, los niveles de vitamina D no estaban disponibles. Se encontró una diferencia significativa en el peso entre los niños con diferentes niveles de vitamina D. La media del logaritmo del peso en el grupo con niveles bajos de vitamina D fue de 1,45, mientras que en los niños con niveles normales de vitamina D, fue de 1,3 (p-valor=0,0001). Además, el IMC mostró una relación similar con los niveles séricos de vitamina D. La media del logaritmo del IMC en los niños con niveles bajos de vitamina D fue de 1,23, y la media del logaritmo del IMC en el grupo con niveles normales de vitamina D fue de 1,1 (p-valor=0,001). Conclusión: Los niños con IMC alto mostraron niveles más bajos de vitamina D. Una dieta saludable, actividades físicas, un diagnóstico temprano de la deficiencia de vitamina D y un tratamiento definitivo pueden prevenir muchas complicaciones que podrían afectar la salud infantil y causar una carga en la comunidad.