Adenike Bitto
El 25 de septiembre de 2015 marcó un hito mundial, ya que los líderes mundiales de 193 países adoptaron la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible. En ella se aplicarán valiosas lecciones aprendidas de las estrategias recientemente completadas de los Objetivos de Desarrollo del Milenio para quince años. Este documento se centra en la salud y el bienestar de las mujeres , que se abordan en los 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible, pero se enfatiza en el quinto: "Igualdad de género y empoderamiento de las mujeres". Después de una consideración cuidadosa y reflexiva de cómo se puede implementar el nuevo objetivo, este documento desarrolla un modelo interesante que describe a las mujeres y las niñas como protagonistas centrales en la realización de cambios positivos en la salud y la afirmación de la vida en sus propias vidas. El modelo enfatiza el paradigma del paraguas protector de relaciones entrelazadas, multisectoriales y recíprocas. Ilustra cómo la implementación de la agenda 2030 se ve facilitada por el establecimiento de colaboraciones significativas, peculiares, intrincadas, multidimensionales y esenciales, que incluyen comunidades de donantes; gobiernos nacionales, regionales, estatales y locales; individuos, familias nucleares y extensas, líderes comunitarios, jefes de instituciones sociales; organizaciones de la sociedad civil y, lo que es más importante, mujeres y niñas de todo el mundo. El documento sugiere cómo iniciar y poner en práctica de manera efectiva los procesos que conducirán a estos nuevos cambios mejorados para las mujeres y las niñas en cada localidad. Las teorías de promoción de la salud y educación para la salud serán herramientas invaluables.