Kaufui V. Wong
Existen pruebas sólidas en la literatura que indican que diversos agentes anestésicos desempeñan el papel de agentes de disfunción cognitiva en el cuerpo humano, de modo que el cerebro se ve afectado al menos temporalmente después del uso de la anestesia. La disfunción cognitiva posoperatoria o POCD es una afección bien reconocida y se ha relacionado con los efectos de la anestesia en el cerebro. Se han realizado muchos estudios con modelos animales que muestran que las células cerebrales de ratas y otros animales se ven afectadas negativamente por diversos productos químicos anestésicos. También se ha estudiado la acumulación de β-amiloide (vinculada a la enfermedad de Alzheimer o EA) causada por anestésicos inhalatorios. El trabajo actual ha demostrado la perspectiva de que las grandes incidencias de EA y demencia en América del Norte (ingresos altos), el Caribe, América Latina, Europa Occidental, Asia Pacífico (ingresos altos), el Sudeste Asiático y Australasia probablemente se deben al mayor uso de anestesia para partos por cesárea, cirugías plásticas opcionales, liposucciones opcionales, pruebas y procedimientos médicos opcionales, por ejemplo, colonoscopia, resonancias magnéticas en estas regiones, en comparación con las naciones menos desarrolladas de la región subsahariana.