Igbokwe JO, Azubuike JO, Nwufo OC, Okafor G, Ezurike BO y Opara UV
Las técnicas de control de contaminantes en las centrales térmicas son un factor clave a tener en cuenta a la hora de analizar el deterioro medioambiental. Este deterioro medioambiental afecta al hombre y al medio ambiente, y suele estar asociado a contaminantes derivados del funcionamiento de las centrales térmicas como el ruido y las vibraciones, el dióxido de azufre, el monóxido de carbono, los óxidos de nitrógeno, la radiación térmica, las partículas en suspensión y algunos microcontaminantes como el Cl2, Cu, Cr, Pb y F que suponen una grave amenaza para el medio ambiente. Estos contaminantes se emiten a la atmósfera, se depositan y descargan con un impacto negativo sobre el medio ambiente. Estos contaminantes, si no se controlan, alteran el proceso de fotosíntesis de las plantas, lo que reduce los principales nutrientes de las mismas, reduce la fertilidad del suelo, desestructura los estratos del suelo, facilita la corrosión de las instalaciones y ataca directamente al hombre y a los animales. Se han puesto en marcha algunas técnicas de control como las que se han visto para reducir estos contaminantes.