Yushika Subedi*
Los nutrientes de las plantas son los elementos que se constituyen en el cuerpo de la planta en forma de metabolitos o se suministran externamente a la planta para su nutrición, crecimiento y metabolismo efectivo. El pepino requiere en total 14 nutrientes para completar un ciclo de vida. Sus requerimientos de carbono e hidrógeno se satisfacen con el aire, mientras que el nitrógeno, el fósforo y el potasio son los principales macronutrientes; calcio, magnesio, azufre, sodio, hierro, molibdeno, cobre, boro, zinc, manganeso y cloro son nutrientes esenciales que el pepino absorbe del suelo. En Nepal, el pepino se cultiva en todos los cinturones ecológicos, principalmente en las tierras bajas que en las altas, y una de las razones por las que los agricultores no invierten totalmente en el cultivo comercial de pepino a gran escala en las tierras altas es el mal comportamiento del crecimiento como resultado de la falta de nutrientes del suelo. Los síntomas de deficiencia de nutrientes se pueden identificar claramente plantando variedades de cultivos en parcelas de omisión de nutrientes. Si la planta muestra algún síntoma de deficiencia de nutrientes, se debe suministrar externamente el nutriente específico.