Suvvari Anitha Sri
El procesador de lecho fluidizado se desarrolló en 1950 y fue uno de los equipos únicos ampliamente utilizados en la industria farmacéutica. Al principio de su invención, se utilizó como un secador simple y más tarde se volvió muy efectivo con varias modificaciones como la adición de boquillas de pulverización, granuladores, pulverización inferior, tecnología de rotor, etc. Con el desarrollo de la tecnología de rotor, el sistema de lecho fluidizado se utilizó para fabricar pellets [10-17]. La velocidad de la operación, la capacidad de controlar las variables, la consistencia de la capa entregada y la forma en que se puede utilizar para recubrir pellets que varían en tamaño [18-26]. La forma y la densidad son los principales puntos de interés del procedimiento. Además, el procedimiento no limita ni el tipo de materiales de recubrimiento utilizados ni los solventes utilizados en los líquidos de recubrimiento. De hecho, incluso las reacciones químicas destinadas a entregar recubrimientos de polímeros a partir de soluciones de monómeros se pueden realizar de manera efectiva en este secador. Dado que tiene la capacidad de controlar las variables del procedimiento, la técnica es adecuadamente adaptable y flexible. Posteriormente, el procedimiento puede utilizarse para recubrir comprimidos medicinales u otros pellets y para realizar granulaciones de comprimidos compactados [27-35].