Ahad Zare
El aborto espontáneo recurrente inexplicado (AVR) es la pérdida de tres o más embarazos antes de la semana 20 de gestación con o sin nacimientos vivos previos, que ocurre en el 1-2% de los embarazos humanos. Varios factores de riesgo establecidos, incluidas las anomalías genéticas y placentarias, la disfunción endocrinológica, la infección, las malformaciones anatómicas uterinas y los trastornos hemostáticos contribuyen al AVR. También se han propuesto factores inmunológicos en el AVR inexplicado. La evidencia ha indicado que el patrón de citocinas, los factores autoinmunes y aloinmunes y otros factores inmunológicos tienen un papel importante en el AVR. Dado que la IgG es la única clase de inmunoglobulina que se transfiere significativamente a través de la barrera placentaria humana y puede pasar de la madre al feto, la evaluamos y sus subclases en esta investigación en pacientes con aborto espontáneo recurrente. En este estudio de casos y controles, incluimos a 176 mujeres con antecedentes de tres o más abortos tempranos secuenciales con una edad media de 31,02 ± 6,64 años que acudieron al Hospital de Mujeres Sarem, Teherán, Irán, entre el 5 de julio de 2018 y el 30 de diciembre de 2018. Se excluyeron del estudio pacientes con anomalías cromosómicas, trastornos genéticos, infecciones (VHB, VHS, VHC, VEB, VIH y síndrome TORCH), enfermedades autoinmunes (presencia de anticuerpos anticardiolipina, anticuerpos antinucleares y anticuerpos antifosfolípidos), anomalías anatómicas, malformaciones uterinas, incompetencia cervical, anomalías endocrinas y diabetes. En cuanto al grupo de control, inscribimos a 139 mujeres sanas no embarazadas con al menos un embarazo exitoso y sin enfermedad previa y una edad media de 32,51 ± 6,044 años. Se tomaron muestras de sangre de los grupos de casos y controles en la ventana de implantación durante la fase lútea (en los días 19-23 del ciclo menstrual) y los sueros se almacenaron a -70 °C hasta la detección de los niveles de IgG y subclases de IgG. Evaluamos la IgG en sangre y las subclases de IgG mediante el método de nefelometría y el análisis estadístico se realizó utilizando SPSS versión 22. Entre los pacientes, 18 mujeres mostraron deficiencia de subclase de IgG. De estos pacientes, 17 mujeres mostraron deficiencia de IgG3, 10 pacientes IgG1, ocho IgG4 y cinco IgG2. Las subclases de IgG en las personas de control sanas estuvieron en el rango normal. Mostrar evidencia de deficiencia de subclases de IgG puede ayudar a identificar pacientes con RSA con causas inmunológicas que pueden beneficiarse de inmunoglobulina intravenosa y otros tratamientos inmunológicos.