Michael Tsatiris* y Kiriaki Kitikidou
La biomasa, como fuente de energía renovable , se puede convertir en combustible en forma sólida, líquida o gaseosa mediante una variedad de métodos de producción tecnológicamente modernos. En este artículo se describen brevemente los procesos termoquímicos y las tecnologías de conversión, con especial énfasis en la combustión directa y la pirólisis. El uso de la madera con fines energéticos resulta cada vez más atractivo en Grecia y en los ecosistemas mediterráneos, ya que se puede transformar en un combustible más valioso y utilizable.